Los que ya hayáis leído «Las letras y yo. Un cuento sobre la dislexia» habréis visto que todas las ilustraciones van acompañadas de una voz que narra la historia, para ayudar a los niños que tengan dificultades para leer el texto.Para grabar esta voz hemos tenido la suerte de contar con una gran profesional y amiga, Rosa Gonzales. Es profesora de teatro y tiene larga experiencia contando cuentos, así que era la mejor voz que podíamos encontrar. Rosa ha interpretado la versión en catalán y ha ayudado a Alicia con la versión en castellano.

Rosa durante la grabación, ante la atenta mirada de Iraida.

Rosa durante la grabación de la versión en catalán, ante la atenta mirada de Iraida.

Ricard, que no pierde detalle, adaptó una habitación de su casa con colchones y mantas en paredes y suelo, para conseguir la sonoridad deseada. Con la grabación y la edición de las pistas pudo rememorar viejos tiempos en los que hacía de técnico de sonido en la universidad, sonorizando conciertos y grabando maquetas a grupos de música.

Ricard haciendo de técnico de sonido.

Ricard ejerciendo de técnico de sonido. Sustituyó la tradicional mesa de mezclas por un MacBook, y la cabina por la terraza.

¿Verdad que leer una frase de un cuento parece algo sencillo? Nosotros pudimos comprobar que no es tan fácil. Rosa y Alicia repitieron cada uno de los textos de cada página una y otra vez, hasta conseguir una entonación adecuada. ¡Fue toda una experiencia!

Alicia grabando la versión en castellano, iPad en mano, frente a Rosa.

Alicia grabando la versión en castellano, iPad en mano, frente a Rosa.

Somos conscientes de que el audio de este cuento es muy importante. El conjunto de audio, imágenes y contenido forman un todo. El tono de la voz y su expresividad acompañan cada uno de los sentimientos de nuestra pequeña protagonista, de modo que lleguen de lleno al lector.

Agradecemos la colaboración del Taller de So de Telecos UPC (http://tdso.upc.edu/) y de Manel Vericat y los amigos en Joan Albert & Kako Music (http://joanalbertandkakomusic.com), quienes nos cedieron de forma desinteresada el material necesario para poder realizar la grabación. ¡Da gusto tener amigos así!